
En contacto con Diario Río Uruguay, la profesional recordó que el "espíritu de esa ley es proteger los derechos de las personas que padecen este tipo de problemática".
La legislación "prevé dos tipos de internaciones, voluntarias o involuntarias; es decir de forma compulsiva", ilustró. Barla contó la experiencia local "con muchos pacientes que vienen de consumos problemáticos de sustancias ilegales", por lo que el monitero debe ser permanente.
Pandemia
La licenciada detalló que la "pandemia ha incrementado" este tipo de situaciones y cuadros. "De hecho en el primer año salió una estadística en cuanto al incremento de alrededor de un 30% en el consumo de alcohol", ejemplificó."Todo es una cadena porque esos problemas de consumo derivan en situaciones conflictivas en lo familiar, lo laboral; generando muchas veces violencia o casos de abusos", agregó.