Consultado sobre el presunto quite en los subsidios que motivaría la suba desmedida de los tubos de gas, Giampaolo fue contundente al ratificar que “el contrato que está vigente establece como fecha de finalización el 31 de diciembre del 2015”, entendiendo que con ello existe “una base legal y un acuerdo firmado en la Secretaria de Energía de la Nación con las grandes distribuidoras que operan en el país para establecer el precio en la misma base”.
Más adelante relató que desde el cuerpo legislativo han solicitado un informe al secretario de Energía de Entre Ríos, Raúl Arroyo, “que nos comunica formalmente que no ha habido ninguna modificación legal que justifique el cambio de precios o el aumento en ninguno de los rubros. El contrato que está vigente desde el año pasado es el mismo que ubica el precio de la garrafa de 10 kilos a $16 en la planta de distribución”.
En ese marco, los concejales buscan por estas horas realizar un fuerte repudio de la situación por la que deben atravesar miles de concordienses, “contra aquellos comerciantes que dispararon sus precios con respecto a otros que ofrecen el mismo servicio, y por ello convocamos a una reunión urgente” que intentarán llevarla a cabo este viernes o la semana próxima, dijo Giampaolo.
“Pedimos que no se abusen de esta situación empresarios que pueden ser severamente sancionados, según nos comunican desde la Secretaria de la Nación” añadió el edil, a la vez que anticipó que elevarán desde el Concejo Deliberante “todo lo que está ocurriendo a la Secretaria de Energía de la Provincia y de la Nación para que se tomen las medidas adecuadas”.
Desde el ENARGAS los ediles supieron extraoficialmente que no habría ningún tipo de cambio en la distribución que justifique la suba en costos de las garrafas.