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Luego de que el obispo Collazuol diera a conocer que los templos de la ciudad podrían abrir sus puertas para que los fieles se acercaran a rezar, respetando una serie de medidas de prevención, el Director de Culto de la Municipalidad de Concordia, Rafael Blanco, salió al cruce de sus palabras en diálogo con Diario Río Uruguay y aclaró que “ningún templo religioso está autorizado para abrir ni para reuniones individuales, mucho menos reuniones grupales”. Asimismo, Blanco explicó que desde la dirección de culto “hemos tenido una serie de reuniones a través de plataformas digitales, tanto con el obispo, como con el rabino, con el pastor Daniel Ozuna, la gente de la Asociación de Iglesias Evangélicas de la República Argentina y religiosos de la ciudad”. En estas reuniones “recibimos la petición de poder abrir los cultos para diferentes actividades, como también trabajar en un protocolo” de prevención.

De esta manera, la Dirección de Culto recibió “una nota firmada por el obispo, por el rabino y por el pastor, donde solicitan la posibilidad del paulatino regreso a las actividades de los templos”. Pero Blanco mencionó que “ese expediente está en manos del intendente para decidir en las próximas semanas, después de evaluar toda la situación”.

Además, Blanco destacó que “a nivel nacional se está trabajando con la Conferencia Episcopal y con los líderes de los diferentes cultos mayoritarios de Argentina en un protocolo que incluya a todas las confecciones religiosas”. Así que, de ser aprobado, “se dará a conocer a través de las autoridades nacionales, luego se va a adherir el gobierno provincial y, seguido a esto, seguramente el municipio lo reconozca y se adhiera, como se viene haciendo durante esta crisis”.

Dicho esto, desde la Direccion de Culto “le seguimos solicitando a la gente que se quede en su casa” porque “puede rezar en su casa, puede convocar un ministro religioso para que vaya a llevar un sacramento, a hacer una oración en la casa, a compartir un rosario, pero siempre dentro de sus hogares”. Porque el estado nacional ha previsto que los ministros religiosos “tengan excepción para poder movilizarse en todo el territorio de la nación, por lo que pueden ir y atender sus necesidades, pueden visitar a los enfermos, pueden llevar alimentos, medicamentos, pueden brindar ayuda”.

Según las palabras de Blanco, “ellos están exceptuados del aislamiento social, preventivo y obligatorio durante la pandemia, pero este no es el caso de los centros –catedrales, parroquias, sinagogas, templos- porque su situación no ha variado hasta el día de hoy y no hay ningún decreto que lo determine”. Así, Blanco concluyó en que “pedimos a todos mucha responsabilidad” al respecto.