Con respecto a la obra que dio origen al Centro de Adicciones, Zabaleta señaló que “la parte que se reestructuró de la escuela antigua es para 24 internos y en este tiempo cuando se esté cumpliendo la primera etapa, en tres o cuatro meses, se va hacer un trabajo de remodelación de la otra parte de la escuela que es para la segunda etapa. Mientras que también se piensa una tercera etapa con la posibilidad de remodelar un predio muy cerquita donde hay una casa que está bastante bien”.
“Por etapa se va a poder dar alojamiento a 24 personas. Aunque también esto dependerá de la cantidad de servidores que dispongamos. Recordemos que ellos son muchachos rehabilitados que prestan ayuda, no son profesionales”, indicó el sacerdote.
En la actualidad, el centro funciona con “seis jóvenes que están acompañados de nuestros servidores”.
En referencia a la ayuda recibida, Zabaleta apuntó que “en lo concreto nos ayuda el municipio, también CTM ha ayudado y después del gobiernos hay promesas de que también lo haga, veremos que se cumpla. Mientras que si la gente desea ayudar puede hacerlo a través de la parroquia donde pedimos $30 por mes, sino lo que cada uno pueda”.
