En relación a la composición por sexo, relató que “a nivel estadístico las mujeres tienen mayores tentativas de suicidios, pero el hombre concreta más”. Así fue que subrayó que mayormente “las franjas de riesgo son los adolescentes y ancianos”, pero diferenció en que “los adolescentes tienen más intentos y los ancianos concretan más, aunque cualquier persona y de cualquier edad puede hacerlo, de hecho es un mito decir que los niños no puedan suicidarse”, aseveró.
En este sentido detalló que estadísticamente de cada adolescente que se suicida se contabilizan cuatro ancianos, a lo que añadió que en los últimos tiempos la Organización Mundial de la Salud (OMS) plantea que “esta relación se esta equiparando porque ha crecido la concreción en la etapa de la adolescencia” informó.
En cuanto a las patologías de riesgo, el profesional precisó que “a nivel estadístico está determinando que el 50% de las personas que se suicidan padecen depresión. En un 10% son esquizofrénicos; el 25 % tiene problemas con el alcohol y las drogas; y el por último hay un porcentaje de patologías borderline, que son fronterizos entre la neurosis y la psicosis que tiene serio trastorno de identidad y tiene características de suicidios”.
Sumado a los factores de riesgos hay rasgos como por ejemplo: de impulsividad, fantasías de muerte y la actitud ambivalente de la vida, la falta de comunicación, la dificultad de pedir ayuda, la agresividad, la ira, el aislamiento social y la desesperanza. "Todos ellos tienen que ver con no poder construir una perspectiva a futuro, que influyen a la hora de tomar la determinación de quitarse la vida", indicó Brodsky.
En cuanto a cómo ayudar a persona cercana que presenta características suicidas, el psicólogo dijo que es necesario "un tratamiento o contención psicológica, eventualmente psiquiátrica depende del caso” y que otra de las formas es “escuchando a quien tiene alguna idea suicida. Hablar con franqueza y preguntar deforma directa, porque eso alivia a quien esta agobiado por algún problema. Permitirle que se exprese sin hacer un juicio de valor, tratar de entender y no entrar en discusión sobre el tema.Es decir que “siempre hay que tomar seriamente las ideas suicidas" enfatizó.