
Explicó que la misma se debe a que “es correlativa con el avance de la enfermedad, ya que genera un problema respiratorio que termina con una neumonía bilateral y se requiere de un tratamiento justamente con oxígeno”.
El entrevistado apuntó que "hay muchas personas que deciden la atención domiciliaria, algo que se usa no solo en este tipo de patología sino con varias".
Agregando que "esto se intenta desocupar camas con pacientes que pueden transitar lo que queda de esta patología en la comodidad de su hogar e incluso es recomendable para pacientes que ya vienen inmunodeprimidos, ya que en la casa con los cuidados correspondientes se puede evitar la exposición a enfermedades nosocomiales o virus intrahospitalarios”, detalló.
La segunda ola
"Esta segunda ola es más fuerte por varios motivos, primero porque son cepas deferentes con mucho más poder de contagio que la teníamos el año pasado; y al mismo tiempo por lo que sabemos de estudios o experiencias en otros países, son cepas más agresiva, por lo que aumenta el consumo de oxígeno", remarcó Ferrando.
Envases
En la actualidad, en el hospital Masvernat de Concordia no se registran faltantes, aseguró el profesional y argumentó que “los proveedores de oxigeno no han registrado inconvenientes ni el año pasado, ni en lo que va de este año y asegura que tampoco lo habrá”.
“Por ahí en lo que puede llegar a haber problema es con los envases, porque sí se necesita muchos tubos para rellenar y no hay, habría un problema. En el que caso de un paciente particular lo que se hace es un sistema concentrados que genera oxigeno por sí mismo, el equipo se instala, es fácil de usar y el paciente tiene oxigeno las 24 horas. Esto garantiza que no hay dependencia de un proveedor”, precisó para concluir Ferrando.