Según el protocolo establecido, cuando un perro cruza de Argentina a Uruguay o viceversa, se solicita un certificado y una serie de estudios que indican que se encuentra libre de Leishmaniasis.
Cristian Gómez, veterinario del SENASA, explicó que “en el MERCOSUR se utiliza un protocolo que tiene dos años de vigencia para estos casos, pero en Argentina aún no hay controles interprovinciales por falta de legislación, por eso es importante no permitir el ingreso al país”.
Entre las nuevas medidas que evalúa el Senasa para controles específicos, se mencionó la posibilidad de exigir un certificado con un plazo de vigencia que determine libre de leishmaniasis a los canes, similar al solicitado para salidas internacionales.
La titular de la cartera de Medio Ambiente local, Belén Esteves, presentó la situación actual de la ciudad e indicó que el Municipio trabaja en la prevención de esta problemática, e informó que junto a las castraciones que realiza el Departamento de Inspección Veterinaria se realiza también el análisis de Leishmaniasis a los canes. “Esto nos da un panorama completo de todos los barrios de la ciudad, dado que el cronograma abarca la totalidad de las áreas del ejido”.
Pero agregó que “todavía es necesario trabajar en la regulación para que a quien compra o adopta un perro se le entregue un certificado con los estudios pertinentes”.
Por su parte, el secretario de Salud concordiense, Mario Imaz, señaló que desde 2010 se trabaja en Concordia en conjunto con la provincia y que en la ciudad no se ha registrado el flebótomo, vector de transmisión. Coincidió con Esteves que “debemos profundizar la tarea de concientización para evitar que se traslade de Salto a Concordia”.