Un milagro, otra denominación no cabe para lo acontecido en la Capital del Arroz. Allí, Juan Bordón tuvo una segunda oportunidad.

Este vecino del barrio El Duraznal llegó a su casa a bordo de su auto, un Renault 9 dominio colocado AOZ 930. Se detuvo y, según Reporte Cuatro, lo habría pasado de gas a nafta. Descendió del rodado para abrir el portón del garaje y - por causas que se tratan de establecer - el vehículo explotó y tomó fuego.

Los bomberos concurrieron al lugar, con una dotación pequeña, pero según el relato de los vecinos no les habría funcionado la bomba de agua y no pudieron ayudar a apagar el siniestro. Se tocó la sirena para convocar a la autobomba, pero ya era demasiado tarde: las llamas consumieron todo el rodado.

Milagrosamente y por segundos, el dueño del vehículo no sufrió lesiones.