El allanamiento que llevó adelante el SENASA, en el vivero Villa María de Sergio Cortiana en colonia Belgrano, provocó el enojo de productores citrícolas de la zona y viveristas, que al ver como quedó el sitio, decidieron marchar hasta la casa del presidente de la Federación del Citrus de Entre Ríos (FECIER), Dante Grigolatto.

Al llegar al domicilio de Grigolatto, los manifestantes arrojaron las plantas arrancadas que habían juntado del vivero. Algunos optaron por tirarlas en el frente de la vivienda, otros directamente las arrojaron sobre el auto del dirigente, pero luego las sacaron.

Además, se pudo ver a una señora acompañada de un joven que al salir del interior del domicilio fueron agredidas verbalmente por los agitados manifestantes.

Fuente: Chajarí al Día