Las llamas no afectaron ningún tipo estructuras en las instalaciones que pertenecen al Obispado de Concordia, pero la combustión de los pastizales generó una densa humareda que redujo considerablemente la visibilidad en la zona de Villa Zorraquin, por lo que incluso debió actuar personal de la Central de Tránsito de la Municipalidad de Concordia, para organizar el tránsito en ese acceso norte.