la ordenanza sobre la “Creación del Ente de Gestión de la Radio Pública de Concordia”,
la que todos conocemos como radio Ciudadana.
La propuesta de tener una radio pública, abierta, pluralista, democrática y de servicios
a la comunidad, tenía décadas en el pensamiento de sectores democráticos de
Concordia, que habían sufrido el monopolio de la AM en los negros periodos de
dictadura.
El periodista Claudio Gastaldi (a la postre primer Director de la radio) le alcanzo la
propuesta al entonces Presidente Municipal Gustavo Bordet. Así empezó el camino
de la radio, desde un periodista independiente, ( que es público y notorio no tiene
ninguna afinidad política con Gustavo Bordet) y un Intendente que supo escuchar y
entender lo importante de un medio radial con las características del que le
proponían, estatal, autárquico, lejos de la bajada de línea del ejectuvo, pero que
ayudara a seguir democratizando la palabra y expresando la voz de los diferentes
sectores políticos, sociales, religiosos, gremiales, deportivos, culturales y de todo el
acontecer de la ciudad.
La radio creció, porque fue leal al mandato fundacional, y porque tiene profesionales
del periodismo y la locución que animan a escucharla. Hoy está entre las dos más
escuchadas de Concordia.
En lo personal puedo decir que nuestra radio pública, en su primera y segunda
mañana (las horas de más encendido de las radios), me hicieron olvidar a los
programas porteños que escuchamos en tantas repetidoras que existen en la ciudad.
Construir un medio de comunicación, requiere de una inversión en “fierros”, pero los
oyentes hacen suyo ese medio, cuando se sienten representados y escuchados, y esa
es la virtud de nuestra radio pública.
Desde diciembre del 2015 (momento en que la radio sale al aire) y hasta la actualidad,
la ordenanza se respetó a rajatabla, primero con Gastaldi como Director, y luego con
Guaglianone (su actual director, del que nadie puede decir que tenía antecedentes
peronistas para ser nombrado, nomás escuchar lo que opino históricamente), esto
viene a confirmar que siempre deben ser los mejores quienes conducen,
construyendo equipos y generando confianza y libertad en sus conducidos.
Enorme sorpresa me he llevado al leer que el gobierno de Azcue va a terminar con la
radio, porque transformarla en un órgano de difusión del gobierno es alejar a los
oyentes y romper el contrato tácito que la emisora tiene con su público.
He leído que algún concejal plantea que la radio “es una agencia de propaganda K”, se
ve que el concejal no es oyente de la programación de la radio, y que en vez de
analizar repite como loro lo que entiende le sirve para construir y fundamentar su
opinión política, muy superficial y de alta holgazanería.
La propia ordenanza de creación del Ente de Gestión de la radio Pública, le da las
herramientas al Intendente para promover los cambios que crea necesario, sin caer en
la tentación de tener un medio partidario. En el Articulo 9 se define como se
constituirá el Directorio, y claramente deja expresado que es el Departamento
ejecutivo quien tendrá mayoría (el presidente debe tener acuerdo del Consejo
Deliberante), y en el artículo 4 se establece que es el Ente quien definirá la
programación, es decir que si un programa no tiene audiencia, no les interesa a los
oyentes, es obvio y natural que sea reemplazado, pero como ocurre en cualquier radio
del mundo, si un programa es aceptado por los oyentes, lo natural es que se ratifique y
siga en el aire.
Seguramente al Intendente lo asesoran sus colaboradores de tener un medio al
servicio del gobierno, que defienda su gestión; sin embargo la historia demuestra que
a las gestiones de gobiernos la sostienen sus hechos, no sus relatos. En los años que
llevo de vida nunca vi a un/a presidente/a tan atacada por los medios de comunicación
como Cristina Fernández en 2011, sin embargo saco el 54% de los votos, y
recordándolo a Perón, y lo cito de memoria, en una entrevista en el exilio dijo, “gane
las elecciones en el 46, con todos los medios en contra, y me dieron un golpe de
estado en el 55 con todos los medios a favor”.
Señor intendente, aún está a tiempo, utilice las herramientas normativas de creación
de la radio PUBLICA para mejorarla, pero no destruya un bien social construido desde
el estado, y junto a la comunidad.