Claro que eso se vio reflejado en el bolsillo de los consumidores quienes, de acuerdo a los estacioneros, cargan en promedio tickets que no superan los $8 mil.
El vicepresidente 1º de Faeni, Daniel Giribone, comentó que "se siente una merma en el consumo después de los aumentos. El que llena el tanque es porque tiene cuenta corriente y extiende el pago, pero el cimbronazo fue importante", se señaló. Y estiman que "estaremos alrededor de un 8% o 10% de baja del consumo".
De todas maneras, Giribone anticipó que la escalada de aumentos recién comienza. "Todavía falta aumentar, no sólo el valor del producto sino los impuestos internos que gravan el combustible. El impuesto a las transferencias y el de dióxido de carbono están atrasados desde el último trimestre de 2021", detalló.
Explicó que estos valores se actualizan con el costo de vida. Y para ello se estima entre un 18% en nafta y 22% en diesel.
