
Como ejemplo, a partir de este sábado, una lata de cerveza marca Brahma comenzó a cobrarse $800 pesos, mientras que la botellita de agua, de la firma que auspicia el evento, ahora debe pagarse $ 600 en el denominado sector VIP.
En esa misma tendencia alcista ingresó la bebida espumante marca Mercier, que trepó a la friolera de $ 4.000.
En lo que tiene que ver con la gastronomía, ya quedó sin efecto una promoción de una hamburguesa con una botellita de gaseosa, que hasta el fin de semana pasado estaba a $ 1.800, ahora se actualizó y sale $ 2.300.
Si bien se contempla que la mercadería adquirida tiene valores agregados como la atención de un mozo y otras contemplaciones, no pasa desapercibido que algunos productos están hasta 5 veces más caro que el precio de góndola de un supermercado.