
Cuando los demás integrantes lo convencieron, la primera aclaración que hizo fue que “acá no nos vamos a quedar", alentándolos a ir a probar suerte a la ciudad de Buenos Aires, "porque yo estaba seguro que íbamos a tener la suerte de llegar. Y así fue”.
Fue allí donde le dedicó un comentario especial al vínculo creativo y comercial que trazaron con Palito Ortega, quien compuso muchos de los temas que fueron grandes éxitos de Los Linces.

Mirando en perspectiva, admite que “la huella que uno ha dejado, no se borra jamás” y que lo llena de orgullo el hecho de “haber triunfado con los muchachos que son de Concordia y que aman Concordia", por lo que "los discos de oro que conseguimos con el grupo, son de Concordia”.

Añoranza
“Uno siempre añora los bailes que había en los clubes, donde iba la familia a sentarse en la mesa. Uno les cuenta a los músicos nuevos, lo que era llegar al Club Libertad lleno de gente, o al Ferro y claro, eso se extraña”, remarcó.En ese marco, Cora recordó cuando lanzaron su primer disco con Los Linces y llegaron al “Ferro que estaba repleto, había gente afuera y me dijeron mira que hay seis mil personas Ariel, no se pueden ni dar vuelta; y nosotros no sabíamos ni por donde entrar. Todas esas cosas que se hicieron bien, se añoran, por supuesto”.