
El reporte del nosocomio completa señalando que tampoco “hay registro de personas heridas graves” y que solo se notificó “el ingreso de heridos leves por peleas familiares y alguna pelea callejera”, coincidiendo así con lo que las autoridades policiales anticiparon a un cronista de Diario Río Uruguay.
Vale traer a colación que en el mes de diciembre del año 2016, la totalidad de los concejales de Concordia unificaron los proyectos de los ediles Amadeo Cresto (FPV) y Esteban Benítez (Cambiemos), aprobando una ordenanza que se comenzó a aplicar seis meses después y que prohibió en todo el territorio de la ciudad de Concordia “la tenencia, detonación, comercialización, transporte, almacenamiento, fabricación, venta minorista, mayorista y el uso particular de todo elemento de pirotecnia.”
Desde esa fecha de 2017 en adelante, los reportes desde el hospital Masvernat destacaron la reducción notable que hubo de heridos por estos artefactos, en un centro de salud que estaba acostumbrado a atender hasta 15 personas lastimadas por la pirotecnia en cada noche festiva, siendo muchos de ellos menores de edad.
Todo eso sin dejar de lado los padecimientos que debía soportar las personas con autismo, hipertensión o problemas psicológicos y/o psiquiátricos, como así también las mascotas, sobre todo los perros.
Si bien es justo reconocer que la utilización de la pirotecnia no pudo ser desterrada por completo, la aplicación de la norma redujo sensiblemente la venta y manipulación de esos productos insalubres.