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Tal y como informara Diario Río Uruguay, luego de un juicio cuyo fallo no fue apelado, se embargaron las cuentas del Instituto de Pediatría, que a partir de esta semana ingresaría en una situación crítica. “Si no conseguimos una solución a este problema, no nos quedaría otra opción que el cierre definitivo”, remarcó a Diario Río Uruguay, el director médico de la institución, Carlos Arizabalo. Agregando que “es una institución de más de 40 años que se estaría terminando y no hay miras de que pueda haber otra”.

A su vez remarcó que “nos inhibieron el dinero de las cuentas bancarias, por lo que si no disponemos del dinero de las cuentas y sino se soluciona, será imposible cumplir con la obligación del pago de los sueldos”.

Consultado sobre la cantidad de empleados que trabajan en la institución, explicó que “hay 25 empleados, entre 10 y 15 profesionales”, además “hay otra gente que vive del Instituto en otras áreas”.

Demanda

Haciendo mención a la demanda que están teniendo en el instituto, Arizabalo comentó que “hoy (lunes) atendemos normalmente como desde el inicio de la cuarentena, con guardias pasivas”. Remarcando que “la demanda de paciente es muy baja, porque de 50-60 pacientes que teníamos por día cayó de 2 a 5 por día”.