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Luego de que se embargaran sus cuentas por un juicio cuyo fallo no fue apelado, el Instituto de Pediatría se enfrenta a una situación crítica que pone en riesgo su funcionamiento.

Al respeto, en diálogo con Diario Río Uruguay, el director médico de la institución, Carlos Arizabalo, explicó que “en este momento estamos atendiendo normalmente con las condiciones que afectan a todo el país”. Sin embargo, Arizabalo reconoció que “estamos muy complicados con el tema del pago de las cuentas y nos resulta difícil operar” así. Por eso, si la situación no se resuelve en los próximos días, “existe la posibilidad de que tengamos que cerrar las puertas ya que no podremos seguir”, subrayó.

Asimismo, el director médico del instituto destacó lo dura que resultará la espera de una resolución debido a que se ve condicionada por “los tiempos judiciales que alargan el proceso, porque ahora arrancarán las ferias judiciales y todo se pasaría para cuando estas terminen”.

De esta manera, Arizabalo remarcó que actualmente “estamos trabajando sin saber si mañana vamos a poder abrir el instituto porque nos están faltando respuestas” y, al mismo tiempo, “estamos con la incertidumbre en cuanto a los tiempos que van a pasar”.