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En diálogo con Diario Río Uruguay, el director de Defensa al Consumidor de Concordia, Pablo Lapiduz, valoró que los programas de precios cuidados “han ido cambiando bastante” y “en términos generales, el problema más difícil que hemos tenido es el de la carne, porque no lo podemos controlar”, reconoció.

Además, respecto a la carne “hemos tenido muchas quejas al respecto”, pero desde la dependencia municipal “no tenemos una manera de determinar ni contamos con ingenieros que puedan hacer una evaluación sobre esto”.

Es por eso que “hemos tomado fotografías, hemos hecho relevamientos y lo hemos mandado a Paraná, porque acá no tenemos facultades para aplicar sanciones, dado que las aplica la división de defensa al consumidor” de la capital de Entre Ríos, explicó.

Por otro lado, Lapiduz consideró que “desde el punto de vista de la ley de defensa al consumidor, todos aquellos que intervienen en la cadena de producción y distribución son responsables” del posible estado final de la carne. Sin embargo, la dependencia únicamente se encarga del “control en la boca de los supermercados” locales.