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A pesar de la efervescencia que generó el tema tras la primera noche de carnaval, algunas de las pocas modificaciones que tuvo la carta de bebidas en el corsódromo duraron un suspiro, tal como se pudo confirmar el pasado fin de semana. Si bien la promesa desde el municipio fue que se había exigido una rebaja sustancial de algunos valores, en concreto, solo se redujo sensiblemente el precio de la botella de agua mineral, la que sigue estando en un precio solo comparable con los mejores restaurantes de la ciudad, ya que se cobra $ 150 por cada una de ellas. En la mayoría de los casos, la rebaja fue insignificante, como el caso de las botellitas de gaseosas de la marca auspiciante, que habían sido vendidas a $ 250 en el primer desfile, luego anunciadas a $ 200 en la segunda noche, pero que ahora volvieron a ser vendidas a $ 250 en la tercera noche.
Vale remarcar que cada pack de los 12 envases de 600 cc. pueden adquirirse hasta en $ 750, de acuerdo al precio de algunas distribuidoras nacionales.

Aquí es necesario comparar que el mismo producto (botellita de gaseosa), pero de una primera marca, tiene un valor de $ 200 en un restaurant cercano a la plaza 25 de Mayo. Donde también se puede adquirir a un precio más económico el agua saborizada, que en el corsódromo tiene un costo de $ 200 por botellita chica, siempre de la marca auspiciante del carnaval. Mientras que en los restaurantes del circuito céntrico el costo de otras marcas va de los $140 a los $160.

Otro caso paradigmático de lo irrisorio de las correcciones fue el caso de las cervezas, donde la lata de 473 cc. pasó de $ 350 a 300. Quedando igualmente por encima de lo que se cobra en el circuito gastronómico local y casi triplicando el precio de góndola de supermercado.
En este rubro, lo que tampoco pasó desapercibido fue lo que sucedió con la cerveza "coronada" en botella de 330 cc., la cual no tuvo ni una mínima corrección, sino que, por el contrario, se borró de un plumazo una promoción que ofrecía 6 botellas a $ 2.5000. Dejando al mismo precio de $ 500 para cada unidad.

Por último, los precios que no tuvieron ninguna modificación fueron los del rubro vinos espumantes, donde el más económico tiene un costo de $ 1.100 en el corsódromo, casi el triple de lo que sale la misma marca en una góndola local.