
Vale remarcar que el comerciante en un primer momento optó por no radicar denuncia y que tanto la policía como la justicia se notificaron del hecho a través de las redes y medios como Diario Río Uruguay que difundieron el video captado por las cámaras de seguridad. Matías relató que una vez que confirmó que no era un error y que en menos de un mes había vuelto a ser víctimas de un grupo de ladrones, “vine armado acá el negocio, porque ya estoy podrido”. Aunque reconoció que “igualmente, si yo los agarraba seguro que no iba a hacer nada porque yo voy preso y ellos no”.
El damnificado reconoció que aún no tenía claro el futuro del negocio, explicando que un drugstore es muy difícil que funcione “con la reja baja, porque tu ganancia está en la venta compulsiva, lo que la gente se lleva aunque no lo venía a buscar”, por lo que ahora “te replanteas que vas a hacer”. Este martes por la mañana, Otero y sus empleados se dedicaban a retirar del negocio las costosas cañas y reeles marca Abu García, además de otras mercaderías costosas. Según una primera estimación realizada en el arqueó, calculan que las pérdidas están por encimas de los $ 25.000.
“Todo esto da mucha bronca, porque pagas impuestos carísimos como si vivieras en Nueva York, para que después vengan y te roben. Algo no está funcionando”, concluyó el comerciante.