
Allí, un malviviente de 30 años ingresó el local y - ante el descuido del dueño - sustrajo unas golosinas. Además, amenazó e intentó golpear al comerciante, quien logró detenerlo y dar aviso a la policía.
El fiscal en turno dispuso que sea detenido por el supuesto delito de “amenazas”. Finalmente, fue alojado en la sección Alcaidía.