
Lo curioso “es que el fuego venía desde uno de los agujeros en la corteza del árbol”, aseveró.
Martes
Cortiana contó que “seguramente quedó alguna brasita y este martes – con el viento, de madrugada – tomó fuego nuevamente”. Subrayando que “se procedió con las mochilas contra incendios para poder apagar totalmente” el siniestro.Sin embargo, el proteccionista explicó que el ejemplar “se consumió por dentro y a lo mejor haya que cortarlo: vamos a evaluarlo”.
El guardafauna puntualizó que se trata de un “ibirapitá, que quiere decir “árbol colorado”. “Me dio una pena grande ver semejante ejemplar con ese maltrato hecho por alguien que no midió el daño que producía”.