
El evento no solo permitió revivir el juego en la cancha, sino que también se convirtió en un espacio para fortalecer los lazos entre quienes alguna vez defendieron sus colores en competencias oficiales y hoy lo hacen por pasión y amor al rugby. A lo largo del día, se disputaron partidos en un marco de respeto y fair play.
Vale mencionar que no es la primera vez que la institución roja realiza este tipo de eventos para reunir amistad y deporte.