
En ese lugar, por causas que se tratan de establecer, el rodado de carga volcó sobre lo que sería el cantero central de la Autovía José Gervasio Artígas, cuando circulaba en sentido de sur a norte.

A raíz del vuelco, el camión terminó con la destrucción de su semirremolque y como consecuencia de esto, el desparramo de las 18 toneladas de reses de carne que traía hacia Concordia.
Que sucedió con la carga
Una vez trasladado el trabajador del volante, la Policía montó un operativo de custodia en el lugar, al que a los pocos minutos llegó una dotación de operarios del frigorífico que esperaba la mercadería.De acuerdo a la explicación que pudo recoger un cronista de Diario Río Uruguay en el lugar del hecho, por cuestiones de rigor para este tipo de cargas, también se hizo presente personal del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), quienes determinaron que solo la mitad de la carga podía continuar con su traslado hasta el destino previsto, en un camión con el frio correspondiente.

Fue así que, en todo tipo de vehículos, un importante número de personas se terminó llevando la mayor parte de las reses. Con la advertencia por parte de las autoridades presentes, que esa gente se llevaba la mercadería esparcida bajo su propia responsabilidad, ya que los técnicos del SENASA no garantizaban su calidad para el consumo, entre otras cosas porque habían estado varias horas sin cadena de frío y eran las reses que habían estado en contacto con el piso y hasta con restos de gasoil del camión siniestrado.