
La persecución acabó con dos personas detenidas y el secuestro de 250 gramos de clorhidrato de cocaína, valuados en aproximadamente 2.500 dólares. Además, se conoció que uno de los detenidos integraba el clan narco de la familia Martínez.
Además de la droga, la policía secuestró un teléfono celular y la motocicleta utilizada para el transporte. Ambos quedaron detenidos por el delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en flagrancia, por disposición de la fiscal Julia Rivoira.