“El perro estaba con síntomas, tenía anorexia, falta de apetito, un bajo estado corporal y su dueño indicó que tenía problemas respiratorios, por lo que le sugerí hacer el estudio de la enfermedad”, explicó a Diario Río Uruguay, Gustavo Blanchard, integrante de la clínica veterinaria.
Una vez realizado el estudio “dio positivo y tenía un estado deteriorado”, además el dueño del can “tiene dos perros más en su domicilio, por lo que le expliqué sobre la enfermedad y le hizo el estudio a los otros dos, que salieron negativos”.
Recomendaciones
“Las recomendaciones son siempre mantener lugares limpios, porque en este caso, te diría que era ideal el lugar donde se refugia la Lutzomyia, que es el vector que transmite la enfermedad”, señaló Blanchard. Además, “los lugares donde hay muchas hojas secas acumuladas y los gallineros, son sitios propensos para que se crie y refugie el vector”.
Por otra parte, remarcó que en los perros hay que estar atentos a la baja de peso, sangrado de nariz, falta de pelo en orejas, descamación en distintas partes del cuerpo, crecimiento excesivo de uñas, problemas dermicos etc.
Por último, puntualizo que “existen collares repelentes (específicos), que evitan que el animal sea picado por el vector”.
