Siempre de acuerdo a lo que pudo constatar un cronista de Diario Río Uruguay presente en el lugar, el hecho ocurrió cuando el funcionario policial de la comisaría Séptima se encontraba prestando servicios en el nosocomio, y fue allí donde sustrajo el teléfono celular de la denunciante.
Asimismo, la damnificada aportó datos para la investigación, informando que a través de su Gmail la ubicación del aparato daba que se encontraba en la dirección donde está ubicada la comisaría Séptima.
Es así que se concretó el procedimiento en la comisaría, donde el funcionario entregó el celular en cuestión y disposición del fiscal en turno, luego terminó detenido.
