
“Hay una lucha por sostener privilegios y cajas, no por mejorar la atención de los afiliados”, aseguró Frigerio, quien consideró que el proyecto del Ejecutivo busca ordenar el sistema. “Corregimos el proyecto en función de aportes de la oposición y gremios”, remarcó.
El mandatario apuntó que “ayer se desenmascararon muchas mentiras y miedos a perder privilegios que tienen muchos vivos”. Además, aseguró que “no es por los afiliados, sino por sostener privilegios y cajas, un esquema oscuro con falta de transparencia que la gran mayoría conocía y todos miraban para otro lado”.
Frigerio indicó que el proyecto fue modificado para contemplar las observaciones recibidas. “La gran mayoría de las observaciones, de las dudas, de los miedos que nos planteaban, lo hemos cambiado en función de eso, manteniendo el espíritu. No queremos volver a lo que había antes”, precisó.
El gobernador explicó que el objetivo es garantizar la sostenibilidad del sistema y mejorar la atención. “Hacemos todo esto para cambiar, para que no se vuelva a poner en riesgo el futuro de la obra social y la atención de los afiliados”, afirmó.
También informó que la obra social acumulaba una deuda de 42.000 millones de pesos y un déficit mensual de 3.000 millones. “Los afiliados tenían que recurrir a la Justicia para acceder a la salud. Detrás de eso también había un negocio con los amparos”, sostuvo.
Frigerio sostuvo que se tomó la decisión de intervenir el IOSPER para iniciar un proceso de cambio estructural “planteamos un cambio con transparencia, gestión profesional y responsabilidad”.
En relación a las denuncias por irregularidades detectadas por la comisión interventora, el mandatario aclaró que los casos ya están judicializados. “Es la Justicia la que determinará las responsabilidades de muchas cosas que son un desfalco para el Estado y para los afiliados de la obra social”, afirmó. También cuestionó que “la comisión fiscalizadora nunca funcionó, y nadie controlaba nada”.
Sobre el vencimiento del plazo de intervención, previsto para el 30 de junio, Frigerio fue tajante y subrayó que “no hay margen para extender ese plazo. Si no se aprueba la ley, vuelven los directores que nos llevaron a este lugar”.
Finalmente, insistió en que el proyecto fue ajustado tras escuchar observaciones. “No queremos volver a lo que había antes. Esto es para devolverle la obra social a los afiliados, que estaba privatizada en manos de unos pocos”, concluyó.