
“Este programa económico, que está anclado en un tipo de cambio ficticio, destruye la actividad y sólo beneficia al sector financiero. Se genera una falsa sensación de estabilidad macroeconómica pero en realidad es la paz de los cementerios. Lo estamos viendo en el bajo nivel de reserva que hay para las vacaciones y el cierre de dos hoteles de larga trayectoria en la provincia, por ejemplo”, manifestó Michel.
Para Michel, “el turismo entrerriano está en crisis por el programa económico nacional y la falta de gestión provincial”.
Por su parte, Adán Bahl expresó: “Ante este escenario, se supone que desde la gestión provincial deberían tomarse medidas para disminuir los costos que tienen los prestadores, y promover una agenda que sea convocante para los turistas, pero no se ve acción en ese sentido, y nosotros pensamos que es porque en el fondo no les importa”.